Hay tradiciones que no deberían perderse, y entre ellas evidentemente se encuentra la de reírnos de Miley Cyrus como si nos fuera la vida en ello. Si se cae de boca podría abrir un pozo petrolífero con sus paletas, tiene una voz que duele y la frase más relevante de su discografía es "To my homegirls here with the big butts, shaking it like we at a strip club", y si esto es así, es decir, si Miley tiene tan poco que ofrecer a la industria musical ¿qué hace aún aquí y por qué nadie la ha llevado de vuelta al grado medio de esteticista que dejó a mitad de curso?
La respuesta está clara. Miley ha reciclado sus recatadas braguitas virginales de color y ahora destina la totalidad de las ganancias de sus discos en hacerse la láser en las ingles día sí, día también. Con Bangerz, Miley, pretendía demostrar que ya no era una niña y que son exactamente veintidós centímetros los que le entran en la boca sin dar ni una sola arcada.
Hace unas semanas estrenaba el video de su nuevo single, Adore You. Un precioso y cuidado cortometraje cargado de sutileza donde se palpa el coño de al menos setenta maneras posibles. De lado, de espaldas, sosteniendo una cámara con sus propias manos, todo un sin fin de posibilidades de las que Miley nos hace participes durante casi cinco minutos.
Por si aún no nos habían quedado claras sus intenciones, ahora, de manera innecesaria, para que vamos a engañarnos, ha estrenado la versión acústica del tema, con unos acordes más lentos y mucho más sensual, aún si cabe.
Aquí os dejamos con la nueva versión de Adore You recién filtrada.
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